El Gobierno rectifica y la asignatura de Religión puntuará para pasar de curso

Tendrá menos horas lectivas, será opcional y no contará en el expediente académico.
EFE. Madrid | HERALDO
La asignatura de Religión, que tendrá una equivalente laica, será optativa, verá reducidas sus horas de impartición -de 210 a 140 semanales- y no será puntuable en el expediente académico ni para la obtención de becas, pero sí contará para pasar de curso. El Ministerio de Educación y Ciencia espera que esta nueva regulación, incluida en el borrador de decreto de enseñanzas mínimas correspondientes a la Educación Secundaria Obligatoria (ESO), sea aprobada en el Consejo de Ministros este año. De acuerdo con este borrador, los padres o tutores de alumnos en cursos de ESO (de 12 a 16 años) podrán elegir al inicio de cada curso si quieren que sus hijos reciban o no enseñanza de Religión.
Los que opten por esa enseñanza podrán a su vez elegir entre la Religión Católica -u otras confesiones religiosas con las que el Estado tenga suscritos acuerdos de cooperación en materia educativa- o la asignatura Historia y Cultura de las Religiones, que se impartirá desde un punto de vista aconfesional. Fuentes del Ministerio insistieron ayer en que una y otra tienen carácter optativo y que los padres podrán también elegir que sus hijos no opten por ninguna de ellas, y en ese caso recibir durante ese tiempo la debida «atención educativa» por parte del centro escolar, que puede optar por que los alumnos no matriculados en Religión dediquen el tiempo al estudio, la lectura o la informática.
Como cualquier asignatura De acuerdo con el borrador de decreto elaborado por el Ministerio, la asignatura de Religión y la de Historia y Cultura de las Religiones se realizarán en los mismos términos y con los mismos efectos que cualquier otra asignatura de la etapa ESO, por lo que podría bloquear, si está suspendida (junto a dos asignaturas más), el paso de curso. Sin embargo, las notas de Religión o de su alternativa aconfesional no se tendrán en cuenta en el expediente académico ni para la obtención de becas, con el fin de garantizar el principio de igualdad y la libre concurrencia entre todos los alumnos. Antes de su aprobación en el Consejo de Ministros, el decreto será debatido en la Comisión General de Educación, en una Conferencia Sectorial de Educación, y será además analizado por el Consejo Escolar del Estado y por el Consejo de Estado.
Fuentes del Ministerio anunciaron ayer que para informar sobre el contenido de este decreto y debatir el mismo se reunirá el próximo martes en Madrid la Conferencia General de Educación, en la que estarán presentes el secretario general de Educación, Alejandro Tiana y los directores generales de Educación de todas las Comunidades Autónomas. El decreto de las enseñanzas mínimas que todos los alumnos deberán recibir en el ciclo de Secundaria completará el de Educación Primaria (6-12 años), en el que la Religión (en este caso sólo se ha previsto la versión confesional) será también optativa. La propuesta ministerial mantiene que los centros docentes arbitrarán también en este ciclo las medidas oportunas para que los alumnos que no estudien Religión reciban la «debida atención educativa» para que la elección de una u otra opción (cursar o no Religión) no implique ninguna discriminación.
Las mismas fuentes subrayaron ayer que la regulación de esta asignatura en sendos borradores (el de Primaria y el de Secundaria) se ajusta «plenamente» al compromiso del Gobierno de respetar el derecho de los padres que quieran la enseñanza de Religión para sus hijos y el de los que no la quieran, y de que el derecho de unos (a dar Religión) no suponga una obligación para otros (a tener una asignatura alternativa). En cuanto a la polémica sobre la contratación de profesores para la impartición de esta asignatura, la ministra de Educación y Ciencia, Mercedes Cabrera, aseguró el martes, en relación al borrador de Real Decreto por el que se regula la relación laboral de estos docentes, que el Gobierno «está tratando de hacer compatibles los acuerdos con la Santa Sede». Cabrera indicó que los profesores de Religión «acceden al profesorado por la venia que les da la Iglesia Católica para enseñar». «Se está tratando de respetar los acuerdos con la Santa Sede y a la vez los acuerdos de los profesores», explicó la ministra.