Desalojan a la pública y meten a la privada

La DGA saca a Fapar de una sala para cedersela a Fecaparagón
EL PERIÓDICO 18/01/2012.
Por una sala. La decisión de la Consejería de Educación, Universidad, Cultura y Deporte del Gobierno de Aragón de desalojar a la Federación de Asociaciones de Padres (Fapar) de las dependencias que ocupaban para cedérselas a la Federación Cristiana de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos de Aragón (Fecaparagón) ha desatado la polémica.
Desde Fapar mostraron su indignación por lo que entienden como un claro "ataque a la participación de las familias de la escuela pública de esta comunidad y a la federación que la representa". También quisieron recalcar que el espacio que hasta ahora utilizaban era aprovechado por 403 asociaciones de padres y madres, mientras que Fecaparagón "tiene 72". Además, indicaron que han intentando "sin éxito hasta la fecha" ponerse en contacto con esta administración para tratar las necesidades de espacio de cada organización.
Desde la federación de familias cristianas de los centros concertados recalcaron que llevan años pidiendo un espacio mayor ya que ahora estaban en un "cuchitril", expresó su presidente Pedro Martínez. Además, indicó que Fapar se había apropiado de la sala común que ahora ha sido asignada por la DGA a Fecaparagón. "Este lugar se lo arrogó Fapar y ahora la utilizaremos nosotros", especificó.
Por su parte, la portavoz socialista en la comisión de Educación, Mayte Pérez, denunció la "deriva que está tomando la educación pública con el Gobierno de Rudi", ejemplificado en esta decisión. "Este es un nuevo caso y un nuevo favor de la DGA a la educación concertada, frente a la educación pública", transmitió Pérez.
Desde Fecaparagón, Martínez contestó a la portavoz socialista mostrando su sorpresa y malestar por la "preocupación de la señora Pérez por un asunto de esta trascendencia y no se preocupe por las actividades que tenemos propuestas como el consumo de alcohol entre menores, el proyecto Familia y Colegio que conocen perfectamente".
El Independiente
Táctica y estrategia de la derecha feroz
JOSÉ LUIS Trasobares 18/01/2012
Esto es un disparate, y el personal anda descolocadísimo. Oigo a Garzón explicarse ante el tribunal que le juzga por el nefando crimen de haber investigado la red corrupta conocida como Gürtel, y alucino. ¿Pero cuál es el problema (aparte de haber puesto de manifiesto que el PP también moja)? ¿Cómo puede ser que se criminalice a un magistrado por cumplir con su obligación? Y todo va por el estilo. El debate político es un puro delirio pues nadie quiere ver la tranca en el ojo propio, y en el habitual reparto de mierda los conservadores pregonan con furor ¡Andalucía!, ¡Andalucía!, mientras los del PSOE claman ¡Valencia!, ¡Valencia!. Y, claro, la despavorida ciudadanía solo atina a gritar ¡Socorro!, ¡Socorro!
En Aragón todo bien, como siempre. El PP, inquieto quizás porque el Heraldo se ha apuntado a meterle caña a Motorland (el excalestric del PAR), lanza otra ofensiva sobre su objetivo favorito: el tranvía. Así que ha presentado unas extrañas cuentas para demostrar que cada viaje sobre raíles sale por un Potosí (para lo cual vuelcan el coste de toda la inversión tranviaria sobre la actividad del primer año y de esta manera les salen cifras de escándalo).
Y así, en medio del ruido, de los gritos, de los llantos por Manuel Fraga (aquel franquista que ahora nos es presentado como padre de la democracia) y de los trajines del desdecido Rajoy, en nuestra tierra Noble ha ocurrido que el Departamento de Educación de la DGA acaba de quitar a la Fapar (la federación de asociaciones de padres de alumnos de los centros públicos) las dependencias que tenía asignadas como sala de reuniones y almacén-biblioteca en el edificio Rosa Arjó. Y lo ha hecho para conceder ese mismo espacio… ¡a Fecaparagón, que organiza a los padres de los centros católicos concertados!
Quiero creer que este ataque a 403 asociaciones que agrupan a cien mil familias ha sido fruto de un error o de algún acceso de majadería en el entorno de la consejera Serrat. Porque, si se trata de una muestra de sectaria ferocidad derechista, entonces habrá que pensar en remangarse y aprestarse a defender con uñas y dientes la escuela pública aragonesa. Hay cosas que ni se puede ni se debe tolerar.
Baja
La Consejería de Educación, que dirige Dolores Monserrat, ha desalojado un local que usaba la Fapar, que defiende la escuela pública, para dárselo a Fecaparagón, representantes de las familias cristianas de los centros concertados. Sin comentarios.
18/01/2012 El Periódico de Aragón