Educación investiga cuarenta denuncias por falsear datos para obtener plaza en colegios

La DGA cruza datos para comprobar si hay fraudes. La mayoría de los casos se dan en los centros Romareda, Marianistas y Agustinos.
P. CIRIA. Zaragoza | Heraldo
El Departamento de Educación investiga cuarenta denuncias interpuestas por padres, en las que se acusa a otras familias de falsear datos para obtener plazas en determinados colegios. En todos los supuestos se trata de presuntos fraudes en el padrón, es decir, de casos en los que se ha puesto en la solicitud un domicilio que no es el real, para conseguir así más puntos por cercanía a una determinada escuela. El grueso de las reclamaciones corresponde a los centros Romareda, Santa María del Pilar (Marianistas) y San Agustín (Agustinos), todos ellos son concertados y están ubicados en la capital aragonesa.
La DGA ha notificado a las familias afectadas que sus peticiones están bajo sospecha y ha comenzado a cruzar los datos de las solicitudes denunciadas con los que tiene a su alcance: los de la Agencia Tributaria y el Salud, para comprobar si se ha cometido fraude. La resolución se conocerá a finales de julio. Si se demuestra que unos padres han hecho trampas, se retirará la plaza adjudicada a su hijo y la comisión de garantías de escolarización le buscará otro centro. Lo hará una vez que haya asignado puesto al resto de niños que no han obtenido el colegio deseado y le dará aquel en el que queden vacantes, independientemente de las preferencias que la familia hubiera puesto en su solicitud inicial.
El director provincial de Educación en Zaragoza, Felipe Faci, explicó ayer que los padres que tengan los documentos en regla deben estar tranquilos. «No se tomarán decisiones si no estamos seguros al cien por cien de que se ha cometido un fraude. Por eso, el proceso es largo y complicado. Tenemos que comprobar los datos con prudencia», dijo.
Los centros en los que se demuestre que ha habido fraudes deberán volver a baremar para ofrecer las plazas libres a los alumnos que están en la lista de espera. Lo harán en cuanto Educación les comunique que se han retirado los puestos a los que han hecho trampas.
Aumento de reclamaciones
Este año se ha registrado un incremento de denuncias respecto a los anteriores. Según Faci, esto se debe a que las familias están más concienciadas y ven que sus reclamaciones no caen en saco roto. «Se han dado cuenta de que la Administración actúa e investiga las irregularidades. En los últimos dos procesos de escolarización se ha hecho un gran trabajo para descubrir a los que falsean documentos y seguiremos en esa línea», argumentó el director provincial de Educación.
De hecho, en el proceso actual se detectaron casos de familias que habían mentido en sus solicitudes y que fueron resueltos por los propios colegios, sin necesidad de esperar a que el Gobierno de Aragón los analizara. Esto ocurrió en el centro Pompiliano de la capital aragonesa, donde el consejo escolar logró demostrar a mediados de mayo que dos solicitantes habían hecho trampas al poner en su petición de plaza un domicilio que realmente no era el suyo. La investigación se realizó tras recibir denuncias de familias que no habían logrado un puesto en esta escuela concertada, ubicada en el paseo de Ruiseñores. Los afectados perdieron la plaza que se les había asignado.
«Eran casos tan evidentes que el colegio los pudo resolver en un plazo breve de tiempo. Los supuestos que estamos estudiando ahora son más complejos, por eso llevan más tiempo», comentó Faci.
También habría que investigar todos los que mienten sobre la salud de sus hijos para ganar 0,50 más en el baremo. A mí, ésto, me parece inmoral. Todos los que presentan estos informes deberían ser investigados de oficio, llamando a sus pediatras o comprobando los datos del Salud. Porque si es verdad que taaaantos alumnos tienen enfermedades crónicas nuestra infancia está perdida. De 46 admitidos en mi colegio, 30 tienen una enfermedad…..