El 90% de los alumnos que fracasan han sido repetidores

Casi la mitad de los alumnos que abandonan lo hace en Bachillerato.
La combinación de un sistema escolar rígido y poco atractivo, retrasos de curso desde primaria y faltas continuadas de asistencia suelen terminar en fracaso escolar, pues nueve de cada diez alumnos que no acaban la enseñanza obligatoria han repetido alguna vez y han sido absentistas.
A los diez años, un 10 por ciento ya está en un curso inferior al que corresponde teóricamente (quinto de primaria) y el 42,6% acumula retrasos cuando alcanza cuarto de ESO (último obligatorio), según destaca el estudio Fracaso y abandono escolar en España, elaborado por la Obra Social Fundación la Caixa.
EFE / Madrid.
El informe, presentado ayer, se basa en estadísticas y estudios publicados por el Ministerio de Educación, el INE, la evaluación internacional PISA y el análisis de 850 expedientes de alumnos que han abandonado en ESO (la mayoría en el primer ciclo) y secundaria postobligatoria, entrevistas con ellos, profesores y directores.
El catedrático de Sociología de la Universidad de Salamanca Mariano Fernández Enguita se refirió a la “perversión de la repetición”, un ejemplo de la rigidez del sistema, que puede fatigar, perjudicar y desmotivar al alumno, según las conclusiones. Añadió que el sistema educativo tiene un problema “estructural”, pues un alumno sin graduado en ESO está condenado al abandono y, si se le hace repetir, es empujado al mismo destino.
El profesor de Sociología y Comunicación de Salamanca Luis Mena, otro de los autores, explicó que el abandono escolar es el resultado de un proceso “bastante largo” de desenganche y desapego, que comienza en primaria.
En estos alumnos hay un claro “desinterés” porque la escuela es un “aburrimiento”, no sólo para los que faltan a clase (226 horas en ausencias sin justificar de media en el primer ciclo de ESO), sino también para una parte importante de los que siguen en las aulas (“absentismo interior”).
Los expedientes estudiados indican que no se trata tanto de suspensos (un 13 por ciento) como de no presentarse a clase (a la mitad de la asignaturas como media) ni a los exámenes en consecuencia.
Abandonar, por el contrario, no es un problema para ellos, sino la “liberación de una cárcel” (la escuela obligatoria), una expresión de autonomía y de entrada en la edad adulta.
De las entrevistas con los alumnos, los autores deducen que hay un momento “crítico” para ellos: el tránsito de primaria a secundaria en los centros públicos porque desaparece la figura del profesor “acompañante”, aunque los docentes no aluden a este aspecto.
Sobre las familias, Mena comentó que, en general, animan a los hijos a que sigan estudiando y atienden las llamadas e indicaciones de los centros. Sin embargo, destaca entre los alumnos la sensación de que no vale la pena esforzarse, y su “grupo de iguales” (compañeros y amigos) tiene una influencia “decisiva” en la encrucijada de abandonar o continuar.
Sobre una mayor incidencia del abandono en unas comunidades que en otras, Fernández Enguita señaló que se produce por la combinación de dos factores: un sistema educativo que no atrae y posibilidades de empleo abundante, fácil y no cualificado, al menos hasta que comenzó la crisis.
Los autores pintan también un retrato tipo del alumno que fracasa y abandona por la incidencia de los factores que lo caracteriza: es mayoritariamente varón de 15 años, de origen inmigrante, estudia en un centro público y es hijo de un trabajador no cualificado.
Volumen 29:
Fracaso y abandono escolar en España
Autores: Mariano Fernández Gómez, Luis Mena Martínez y Jaime Riviere Gómez
Descarga del libro entero:
El fracaso escolar en España es un problema bien conocido y estudiado. Este libro pretende avanzar en su comprensión, insistiendo en los procesos que llevan a la situación final de abandono prematuro y centrando el análisis en la situación, la trayectoria y los discursos de los jóvenes que son considerados fracasados escolares.
Para ello recopila las cifras disponibles, analiza la influencia de factores externos, y se detiene en la trayectoria escolar y en la forma de entender su propio abandono de quienes lo han hecho prematuramente.
Se hace una reflexión que intenta recoger las múltiples dimensiones necesarias para explicar el fracaso y el abandono prematuro, que van desde las nuevas coordenadas de la educación en la sociedad de la información a las dinámicas internas y los instrumentos del sistema escolar, pasando por las grandes fracturas sociales y la tendencia a la desvinculación generalizada de los adolescentes respecto de la institución educativa.
bbb