El incremento de matrículas logra extinguir las carreras con menos de diez alumnos

UNIVERSIDAD en Aragón. La reorganización de la oferta académica ha ayudado a la Universidad a hacer los estudios más atractivos.
Alumnos de Huesca, poco antes de empezar la prueba de Selectividad de junio. RAFAEL GOBANTES.
P. C. ZARAGOZA 26/08/2010 Heraldo
La reordenación de la oferta académica que ha hecho la Universidad de Zaragoza y el incremento de estudiantes del pasado curso sumado al que habrá en este próximo (se espera un 10% de nuevos universitarios) han dado al traste con la decena de títulos que tenían en sus clases a menos de diez estudiantes matriculados.
En los últimos años, se encontraban en esta situación entre otros, Humanidades (0,6 alumnos de media en Teruel y 3 en Huesca), Estadística (3,8), Relaciones Laborales (7 en Huesca), Filología Clásica (7,6) e Ingeniería Técnica Industrial, especialidad en Química Industrial (3,2). Debido a su escasa demanda, estas carreras resultaban económicamente insostenibles y la institución decidió reformar su mapa de titulaciones. El objetivo era transformarlas y hacerlas más atractivas a los universitarios y, en caso de no conseguirlo, hacer que directamente desaparecieran.
Con los cambios introducidos se ha pasado de las 81 carreras que tenía hasta la fecha la Universidad de Zaragoza hasta las 69 que se ofertarán en este 2010. Este año, además, concluía el plazo para culminar la adaptación a las exigencias de Europa y el presente recorte de doce carreras contribuye a conseguir el objetivo. Las doce titulaciones dejarán de ofertarse tal y como se conocen ahora, aunque eso no quiere decir que todas desaparezcan por completo del panorama universitario.
¿Qué ha pasado entonces con ellas? Vista la baja demanda que acumulaban, el Rectorado zaragozano ha decidido integrarlas en otras carreras o bien las ha convertido en másteres o especialidades.
Por ejemplo, en la politécnica de La Almunia, las ingenierías técnica agrícola (en las especialidades de hortofruticultura y en industrias agrarias), la técnica industrial (especialidades en electrónica y mecánica) y la técnica en informática de sistemas han pasado todas a formar parte de unos estudios a los que se ha dado el nombre de ingeniería de organización industrial.
Otras carreras, que tampoco lograban reunir a más de diez alumnos por aula, han dejado directamente de ser licenciaturas o diplomaturas para convertirse en estudios de postgrados. El mejor botón de ejemplo es el grado de Humanidades.
Cambio de tendencia
El cambio en el mapa de titulaciones ha llegado acompañado de un incremento de estudiantes -el próximo curso se prevé un 10% de nuevos universitarios-, que confirma el cambio de tendencia iniciado el año pasado cuando, por primera vez en más de una década, el número de matrículas creció en esa misma cantidad y se superaron los 31.500 alumnos.
Este aumento ha provocado que no solo no haya carreras con menos de diez alumnos, sino que en más de la mitad de los grados que se ofertan en los campus aragoneses haya habido que abrir listas de espera para incluir a todos los alumnos que se han interesado por estudiarlas. Las más abultadas, como ya es habitual, se dan en las carreras del área de las Ciencias de la Salud como Medicina, Enfermería, Odontología o Fisioterapia.
Las aulas de la institución pública sufrían desde mediados de los noventa una caída de inscripciones motivada por la bajada de la natalidad y el repunte de la formación profesional, lo que les había hecho perder cerca de 15.000 estudiantes.