España limita su autonomía escolar, igual que Francia, Grecia y Portugal
MAGISTERIO
Históricamente sólo los colegios de Bélgica y Holanda tenían más libertad
En España, los colegios proponen, pero no disponen. Esta es una de las conclusiones a la que ha llegado el estudio La autonomía en Europa. Políticas y medidas, elaborado por la Red de Información sobre Educación en Europa (Eurydice) junto al Ministerio de Educación Portugués y que revela que la autonomía escolar en España es pionera pero general y limitada, al menos en lo que a gestión de recursos se refiere.
La investigación, llevada a cabo entre 2006 y 2007 y que analiza 30 naciones europeas (las 27 de la UE, más Islandia, Liechstenstein y Noruega) es clara en este aspecto. Los países del norte del continente conceden más autonomía a los colegios que los del sur y también son los que mejor nota sacan en PISA.
Ján Figel, responsable de Educación, Formación, Cultura y Juventud de la Comisión Europea, explica la importancia de la autonomía escolar y la define como ¿tema clave en la agenda política, si no de todos, de la mayoría de los países europeos?. Esto se debe a que ¿los colegios colocan los cimientos para las sociedades del futuro, al jugar un rol crucial en la formación de sus ciudadanos?, añade.
A pesar de esto, ¿a excepción de algunos países, la autonomía escolar no es una tradición en Europa? explica el estudio de Eurydice, y ¿sus colegios, históricamente, no han tenido mucha libertad de movimiento para definir los currículos y establecer los objetivos de enseñanza o gestionar recursos humanos y financieros?, añade. Las excepciones de las que el informe habla son los casos de Bélgica y Holanda, que ya hace medio siglo iniciaron un primer movimiento a favor de la autonomía escolar, referida a principios ideológicos. Pero es sólo en la década de los 80 cuando empiezan a darse los primero pasos en el resto del continente.
Aquí, España, tiene un papel protagonista, recuerda este informe, y aunque no pueda presumir de una autonomía plena en sus colegios, –el estudio clasifica a España junto a Grecia, Francia o Portugal, como una ¿autonomía limitada?, sí puede hacerlo por ser una de las pioneras, aunque sea sólo entendiendo el término de autonomía más como ¿descentralización? que como otra cosa.
Los tres pasos
El primer paso dado por Europa en el campo de la autonomía escolar, después de que lo hiciesen Bélgica y Holanda, fue en la década de los 80. Y fue la LODE en 1985, como ocurrió con decretos paralelos, en Francia, en el mismo año o en Reino Unido, tres años más tarde, una de las pioneras en implantar unas pinceladas de autonomía. Estos primeros pasos se produjeron más como un modo de integrar la escuela en el entorno social que como una idea de autonomía propiamente dicha, como sí se había dado en Bélgica y Holanda, recuerda el informe. Y aunque el Estado cedió varios de sus poderes, la mayor parte de ellos se quedaron en los gobiernos regionales y locales, sin llegar a los colegios. Sólo las escuelas de Gran Bretaña (exceptuando Escocia) se acercaron más a la amplia autonomía de sus escuelas.
Hay que esperar a la década de los 90, para que la autonomía escolar europea dé un segundo paso y una a las reformas, anteriormente entendidas como de descentralización, la idea de ¿gestión eficiente de los fondos públicos?, aclara el Eurydice, con el fin de evaluar y analizar la calidad de sus servicios. Esta nueva oleada fue la de una expansión generalizada de la autonomía por gran parte del continente y tanto países nórdicos y Austria, por un lado, como la República Checa, Hungría, Polonia, Eslovaquia y los Estado Bálticos, por otro, –al desintegrase la Unión Soviética–, se subieron al carro de la liberación escolar.
Por último, la entrada del nuevo milenio trajo consigo una nuevo paso hacia la autonomía escolar, tanto con la incorporación de políticas de autonomía por parte los países que faltaban por otorgarla, como con la renovación de las que ya existían, aunque con pocas novedades. Los primeros, que aplicaron por primera vez políticas de autonomía a sus colegios fueron Alemania, Lituania, Luxemburgo y Rumanía; y los que renovaron sus políticas ya implantadas, fueron tanto España, con la LOE, en 2006, como Letonia, Portugal, Escocia y Francia. Además, en esta década la visión de autonomía escolar ha evolucionado hasta entenderse como ¿una herramienta para mejorar la Educación?, según el Eurydice, aunque en formas y grados distintos.
Grados de autonomía
Ni en función de la localización geográfica, ni temporal, ni del grado en el que se aplica. El informe de Eurydice revela que la autonomía aplicada en los colegios de Europa, varía en cuándo, dónde y también en cuanto se otorgue. Y aparte de las diferencias que explicaba en función de cronología y contexto, el estudio habla de cuatro categorías según su grado de actuación. éstas pueden ser ¿plena?, si el colegio toma las decisiones sin la intervención de organismos externos; ¿limitada?, si el colegio sólo puede decidir dentro de las opciones que estipula la autoridad de Educación; ¿nula?, si no toma decisiones en ningún área; o ¿selectiva?, si el cuerpo administrativo o autoridad local puede elegir delegar o no, los poderes de decisión en ciertas áreas, a los colegios. éste es el caso de Holanda, donde la autoridad competente para los colegios es responsable de ¿elegir las áreas en las que se delegan ciertos poderes?.
La responsabilidad
El Eurydice también hace un repaso de la autonomía escolar en los 30 países, en función de las áreas de responsabilidad. Y expone que si se habla de gasto público, unos, como Bélgica, Letonia y Suecia cuentan con autonomía plena; otros como Bulgaria, Irlanda, Francia, Chipre y Rumanía, no cuentan con ninguna; y que la mayoría goza de más o menos autonomía, dependiendo de la categoría del gasto. En concreto, en España, los colegios son libres de tomar sus propias decisiones en cuanto a la adquisición de equipamiento informático, aunque son las Comunidades Autónomas las que les proporcionan la mayor parte de este material.
En el uso de los fondos privados, también son sólo unos pocos los privilegiados que cuentan con más o menos autonomía. Es el caso de Bélgica, Italia y Reino Unido que gozan de libertad en cuestión de donaciones, ingresos y préstamos. En este caso, explica el estudio que en España los colegios no pueden conseguir recursos extras derivados de las actividades llevadas a cabo por asociaciones de padres y estudiantes.En materia de Recursos Humanos, el estudio explica que ¿en términos generales la mayoría de los países conceden más autonomía con respecto a la gestión de personal no docente?. En el caso específico de la gestión de directores, más de la mitad de los países no conceden autonomía a los colegios.