Los aragoneses repiten más que la media en Primaria
La DGA asegura que la aplicación de medidas de refuerzo a los niños hace que el fracaso se reduzca en Secundaria. Un 24% deja los estudios tras la etapa obligatoria, lo que se han convertido en uno de los caballos de batalla de las Administraciones.
P. CIRIA. Zaragoza | Heraldo de Aragón
El fracaso escolar y el abandono prematuro de los estudios son dos de los caballos de batalla de todas las Administraciones educativas del país. Ninguna Comunidad se libra de tener preocupantes porcentajes de repetidores en sus aulas, aunque las cifras varían según el nivel educativo. En Primaria, Aragón tiene una de los datos más altos de alumnos que no superan el curso. En concreto, un 7,4% de los que estudian sexto de Primaria repite, frente al 5,9% de media nacional. Por encima de nuestra Comunidad se sitúan tan solo Canarias, Baleares, Murcia y Castilla León.
En cambio, en Educación Secundaria Obligatoria, la situación se invierte y Aragón registra uno de los porcentajes más bajos (un 9,7% de los que cursan cuarto de la ESO repite) solo mejorado por País Vasco (9,4%), Navarra (9,5%) y Galicia (9,5%) e inferior a la media del país, que supone un 12%. Estos son los principales datos de un informe sobre la Educación elaborado por la Fundación Jaume Bofill (dedicada al estudio para la mejora de la educación), que alerta de que los indicadores sitúan a España como el tercer país europeo con más abandonos de los estudios en 2005.
Atendiendo a Aragón, ¿por qué tiene un porcentaje tan alto de repetidores en Primaria y, en cambio, es una de las que menos registra en Secundaria? Para los responsables de la elaboración del estudio, la respuesta es sencilla: la detección de dificultades de aprendizajes y del fracaso escolar a edades tempranas. «En muchas Comunidades, en Primaria no se ponen medidas para que los niños que promocionan de curso con dificultades puedan compensarlas al llegar a la ESO. En Aragón se detectan antes los casos y si es necesario, se hace que los niños repitan», explicó la responsable de Educación de la Fundación Jaume Bofill.
Entre las medidas que ha implantado el departamento de Educación de la DGA para tratar esto, se encuentra el Programa de Refuerzo, Orientación y Apoyo (PROA), que este año se extiende a 58 centros. El proyecto consta de dos planes distintos, uno denominado de acompañamiento, que consiste en clases extras de refuerzo; y otro de apoyo a los estudiantes que más lo necesiten. Este último incide en el entorno del alumno y en la familia.
A estos se suman los programas de la incorporación de tutores de acogida, los cursos de inmersión lingüística, las sesiones de orientación y las clases de apoyo y refuerzo destinados al alumnado inmigrante.
La directora general de Política Educativa, Carmen Martínez Urtasun señaló que en Aragón se aplican pronto las medidas de atención a la diversidad, con lo que «aunque en Primaria haya repeticiones, al final conseguimos que haya más titulados». «Cuanto antes se implantan los programas de apoyo, más éxito final se obtiene», dijo. Pese a esto, las cifras aragonesas y españolas de fracaso escolar continúan por encima de la media europea.
Abandono escolar
Según la Fundación encargada del estudio, unos porcentajes bajos de repetidores en Secundaria ayudan a disminuir el abandono escolar. «Hemos visto que para los niños es menos frustrante volver a hacer un curso en Primaria, porque son pequeños y se adaptan mejor, que en Secundaria. En este último caso, hay muchos de los que suspenden en cuarto de ESO que no lo vuelven a intentar y dejan de estudiar», argumentaron.
En Cataluña, por ejemplo, ocurre lo contrario que en Aragón, ya que cuenta con las tasas más altas de promoción de alumnos en Primaria (solo un 1,5% no pasa de curso), mientras que registra la segunda cifra más alta de repetición en cuarto curso de ESO (el 13,7%).
«No obstante -añadieron desde la Fundación Jaume Bofill- en números absolutos, si se sumaran todos los que repiten en Primaria y Secundaria en ambas Comunidades las cifras serían similares. Por lo que hay que tomar medidas».
Esto se deja notar en las cifras de abandono escolar prematuro. Según los datos del informe de la Fundación, en Aragón esta tasa se sitúa en el 24,1%, una cifra casi idéntica a la que había hace diez años. La media nacional está en 30,8%. Es decir, tres de cada diez personas de entre 18 y 24 años han abandonado el sistema educativo sin haber terminado los estudios de Secundaria postobligatorios.
El efecto de la inmigración
Los responsables del análisis aseguran que la llegada en los últimos años de jóvenes inmigrantes con un nivel de formación bajo y que no siguen estudios ha generado un impacto negativo en las estadísticas, aunque también advierten que un factor decisivo en el panorama actual es la oferta de puestos de trabajo para los que no se requiere cualificación.
Según los datos sobre Aragón del curso 2006-2007, en la ESO había un 10,5% de inmigrantes (la media nacional era de 9,2%). Algo superior era el dato de Primaria, donde los alumnos de otros países representaban el 12,6% (10,3% en España). En concreto, en los colegios aragoneses estudian 22.000 alumnos extranjeros, esto supone un incremento de 3.000 niños respecto al curso pasado. El crecimiento de esta población escolar ha sido constante en los últimos años. En concreto, en la última década hay un 1.607% más. La procedencia de los matriculados es diversa y, aunque los de Rumanía y Ecuador son los más numerosos, hay niños de 80 nacionalidades.
Ante esto, la Fundación Jaume Bofill recomienda a todas las Comunidades que se aumente significativamente la inversión en educación de manera sostenida y que se implanten medidas de atención al alumnado inmigrante. Piden, además, que se refuerce la cultura de la evaluación en la enseñanza.