POLéMICA / EDUCACIÓN PARA LA CIUDADANÍA EN 25 LECCIONES
Crónica | El Mundo
Más de 226.000 alumnos de Secundaria de siete comunidades (Andalucía, Aragón, Asturias, Cantabria, Cataluña, Extremadura y Navarra) estudiarán el próximo curso la asignatura de Educación para la Ciudadanía.
Los del resto de España comenzarán en 2008 y los de Primaria, en 2009. Según el Ministerio de Educación, la materia nace para favorecer «el desarrollo de personas libres e íntegras» y «la formación de futuros ciudadanos con criterio propio». La Conferencia Episcopal, por contra, entiende que el Estado trata de esta manera de convertirse en «formador de la conciencia moral» de los estudiantes y defiende que se recurra «a todos los medios legítimos». Grupos católicos ya han iniciado campañas para promover la objeción de conciencia. Así las cosas, José Antonio Marina, uno de los principales impulsores de la asignatura, defiende que es necesaria: «Cada vez que surge un problema, la sociedad se vuelve a la escuela pidiendo soluciones. Esta asignatura debería ser la respuesta de la escuela a esa demanda». El filósofo es autor de uno de los libros de texto en el que los escolares estudiarán la materia. «Crónica» extracta su contenido para que usted mismo juzgue
José Antonio Marina: «Los valores éticos fundamentales son la vida y su dignidad, la libertad, la igualdad, la seguridad y la paz». |
Arranca en septiembre la materia de Educación para la Ciudadanía -en Secundaria; en 2009 llegará a Primaria- y las editoriales ya tienen listos los libros de texto. Algunas han recurrido a autores de prestigio. De mucho prestigio. La catedrática Carmen Pellicer coordina el de Santillana, Fernando Savater prologa el de la editorial Laberinto y el filósofo José Antonio Marina, colaborador de Crónica y uno de los principales impulsores de la asignatura, es el autor del de SM.
«Nuestra convivencia íntima, nuestro sistema político, nuestras relaciones vecinales deben estar orientadas por valores éticos que nuestros jóvenes deben conocer», sostiene Marina. «Estamos intentando construir una casa común, un gran proyecto ético y necesitamos que nuestros hijos lo conozcan, lo valoren y lo prolonguen. Cada vez que surge un problema social -droga, embarazos adolescentes, violencia, accidentes de tráfico, fracaso escolar- la sociedad se vuelve a la escuela pidiéndole soluciones. Esta asignatura debería ser la respuesta de la escuela a esa demanda». Entresacamos algunos párrafos del libro de Marina para escolares de 2º y 3º de ESO (entre 12 y 14 años).
1. LA CIUDADANÍA. Se llama ciudadanía a la relación entre un individuo y una comunidad política. Gracias a ella, el ciudadano goza de determinados derechos y determinados deberes.
2. ¿QUé TIENE QUE VER CON LA FELICIDAD? Todo lo que hacemos lo hacemos para ser felices. La felicidad personal es un estado de satisfacción personal y de plenitud en el que podemos desarrollar nuestro proyecto de vida.Para conseguirla necesitamos vivir en un ambiente que no lo impida y, a ser posible, que la facilite. Necesitamos que la sociedad sea feliz.
3. EDUCACIÓN PARA LA CIUDADANÍA. La Historia es, en parte, una narración de conflictos. En Educación para la Ciudadanía contamos otra historia, la del intento de los seres humanos por resolver bien los conflictos, por abandonar la ley de la violencia, y construir el proyecto común. Estudiamos las mejores soluciones que ha encontrado y sigue encontrando la inteligencia humana para resolver los problemas fundamentales que plantea la búsqueda de la felicidad personal y la convivencia.
4. LOS VALORES éTICOS FUNDAMENTALES. Hay bienes que todos necesitamos disfrutar para poder tener una vida feliz y digna. Son los bienes materiales y educativos imprescindibles para desarrollarnos como personas; la libertad; la igualdad; la seguridad, y la paz.Decimos que tienen un valor ético porque son imprescindibles para realizar el gran proyecto humano de lograr un mundo justo.
5. LOS DERECHOS HUMANOS. Los valores fundamentales son imprescindibles para vivir una vida feliz. Por eso los hemos protegido con los derechos humanos, que son aquellos que garantizan el derecho de cada persona a disfrutarlos, así como la obligación de defenderlos.
6. LA DIGNIDAD. Es una cualidad que tienen todas las personas que las hace valiosas, importantes y respetables por el hecho de ser personas, con independencia de su fuerza, riqueza, conocimientos, cultura, religión o sexo. No son valiosas porque «valgan para algo», sino en sí mismas, por existir.
7. DERECHOS. Un derecho es todo aquello que puede exigirse de forma legítima a los demás. Los derechos humanos son los que protegen y aseguran el acceso de todas las personas a los valores fundamentales para vivir dignamente.
8. DEBERES. Lo deseable es tener derechos, es decir, poder exigir o hacer todo lo que la ley nos permita. Pero para que esto sea posible tenemos que cumplir nuestros deberes. Deber es la obligación o necesidad que tenemos de hacer algo para conseguir un fin. Para poder exigir nuestros derechos, tenemos que respetar los de los demás.
9. LAS NORMAS. Los derechos imponen deberes y para concretarlos, exigirlos y poderlos realizar, hemos creado normas. Una norma es una regla que nos indica cómo se debe hacer una cosa. Las normas justas son las que sirven para resolver conflictos, son dadas por una autoridad legítima, mediante procedimiento legítimo y no contradicen derechos fundamentales de los afectados.
10. LA CONCIENCIA CÍVICA. La conciencia cívica es la que nos indica cómo debemos comportarnos como ciudadanos. Todo ciudadano debe conocer el gran proyecto ético que la humanidad tiene como reto construir y ser consciente de sus derechos y de sus deberes. Tener la valentía de reclamarlos y cumplirlos.
11. RESPONSABILIDAD. La libertad va asociada a la responsabilidad porque es su fundamento. El buen ciudadano debe ser responsable: saber lo que hace, prever las consecuencias y atender a sus deberes.
12. LA JUSTICIA. La esencia de la justicia está contenida en la llamada «regla de oro»: «No hagas a tu prójimo lo que no te gustaría que te hicieran a ti». A lo largo de la historia todas las religiones han realizado importantes contribuciones a la idea de justicia.
13. LA SOLIDARIDAD. Para que la justicia esté bien orientada necesita estar impulsada, completada y dirigida por la solidaridad.La guía para ser solidarios se encuentra en el principio de reciprocidad: «Haz a los demás lo que te gustaría que ellos hicieran contigo».
14. CONSUMO RESPONSABLE. . Es posible hacer un «test de inteligencia del consumidor». Es inteligente el que compra sólo lo que necesita y no algo innecesario porque está rebajado. El que no se deja influir por lo que la publicidad le ha dicho que compre. El que compra lo que realmente necesita, sin pretender presumir o dar envidia al vecino.
15. LA IDENTIDAD SEXUAL Se llama «heterosexual» a aquella persona que se siente atraída por personas del otro sexo. Y se llama «homosexual» a la persona que se siente atraída por personas del mismo sexo.La homosexualidad ha sido severamente juzgada durante gran parte de la historia. Y en la actualidad, la legislación de algunos países sigue condenándola. Sin embargo, tenemos la obligación ética de respetar la dignidad de todas las personas, reflejada en la Constitución y las leyes españolas.
16. LA IDENTIDAD RELIGIOSA. Uno de los derechos humanos fundamentales protege la libertad de conciencia, es decir, afirma que cada persona puede tener la religión que desee. España tiene una Constitución laica, lo que significa que no hay una religión oficial del Estado, aunque tradicional y culturalmente la religión católica ha sido la mayoritaria.Las religiones deben respetarse entre sí. Todo ciudadano -creyente o no- debe respetar las creencias y ritos de todas las religiones, siempre que no vayan en contra de los derechos humanos.
17. LA SEXUALIDAD. En este asunto, como en todos, es necesario guiarse por los valores de responsabilidad, justicia y solidaridad:– Sexo responsable. Las relaciones deben ser libres y conscientemente aceptadas.– Justicia y sexo. La justicia tiene que ver con el respeto a los demás. Resulta injusta la actuación de una persona que se aprovecha de otra para tener satisfacción sexual, por ejemplo, engañándola. – Solidaridad y sexo. La sexualidad humana está orientada al establecimiento de fuertes vínculos afectivos entre los seres humanos y a la procreación.
18. LA FAMILIA. La familia es el núcleo de la sociedad. Han aparecido nuevas formas:– Familias monoparentales, en las cuales los hijos viven sólo con uno de los padres. Puede deberse a una separación, divorcio, al fallecimiento de uno de los dos o a la decisión de una persona sola de tener o adoptar hijos.– Familias reconstituidas tras un divorcio o separación, en las que pueden convivir hijos de distintas parejas.
19. URBANIDAD. La urbanidad es el conjunto de comportamientos respetuosos hacia los derechos de los demás ciudadanos y hacia su bienestar. Por urbanidad, no hacemos nuestras necesidades fisiológicas en la calle, procuramos evitar conductas groseras, ruidosas, dejamos la basura en los contenedores en vez de tirarla a la calle, o seguimos unas normas al comer, para no provocar repugnancia.
20. EL TRABAJO. Se entiende por trabajo el esfuerzo necesario para producir algún bien.Todos tenemos el deber de trabajar. El que pudiendo trabajar no lo hace se está aprovechando del trabajo de los demás. Pero, además de un deber, el trabajo es un derecho. Los seres humanos necesitamos ganarnos la vida trabajando.
21. LA ESCUELA, Los adultos van a trabajar, y los niños y los jóvenes también. La escuela es el lugar de trabajo de la gente joven. Estos últimos podrían replicar que no se les paga un sueldo, pero esto no es verdad. Todos los ciudadanos se comprometen a pagar a cada estudiante de enseñanza secundaria 4.000 euros al año. Lo que ocurre es que no se lo pagan en dinero sino en clases, profesores, libros.
22. LA GLOBALIZACIÓN. Es el proceso, fundamentalmente económico, que consiste en la creciente integración de las economías nacionales en un mercado mundial. Genera riqueza, pero también da lugar a profundas desigualdades.
23. LA DEMOCRACIA. Se llama democracia a la participación del pueblo en las tareas de gobierno. Es la forma política más eficaz para realizar el proyecto ético común de alcanzar un mundo más justo.
24. CIUDADANOS Y POLÍTICOS. Los protagonistas de la democracia somos los ciudadanos. Los políticos son profesionales a los que contratamos para que trabajen por el bien común. Si no lo hacen bien, podemos cambiarlos. Los ciudadanos tenemos la obligación de indicar a los políticos lo que queremos y vigilar para que hagan bien su trabajo.
25. LA DEMAGOGIA. Es la estrategia política de ciertos líderes que, para satisfacer sus propios intereses, buscan atraerse a la opinión popular mediante halagos, falsedades y exaltando los ánimos, en lugar de usar argumentos racionales. La manipulación que pretende la demagogia será más difícil de lograr cuanto mayor sea la formación y cultura de los ciudadanos.
Extractado de «Educación para la Ciudadanía. ESO», de la editorial SM.