Uno de cada cuatro profesores dedica el 30% de la clase a hacer callar o a tareas administrativas
EL PAÍS – J. A. A. – Madrid – 16/06/2009
La OCDE presenta los resultados de un estudio en el que han participado 90.000 profesores de 23 países
Uno de cada cuatro profesores pierde al menos un 30% de las clases en tareas administrativas o en lidiar con los alumnos que interrumpen. Esto ocurre en los 23 países en los que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) ha hecho una macroencuesta en la que han participado unos 90.000 profesores de instituto. Los resultados se han presentado hoy y España es uno de esos países.
Los docentes españoles de secundaria están entre los más molestos con el clima de sus clases. Junto a España, en Mexico, Italia, Eslovaquia y Estonia, más del 70% de ellos siente que en sus clases las interrupciones de los alumnos perturban bastante o mucho. En España, donde el nivel de formación continua de los profesores es alto, el informe sí ve una falta de revisión (no ya de evaluación interna o externa) del trabajo del docente: casi la mitad de los profesores no recibe ningún tipo de valoración ni comentario de su trabajo, la cifra más alta del informe sólo detrás de Italia.
Por lo demás, tres de cada cuatro profesores perciben una falta de incentivos a su trabajo y el mal comportamiento de los alumnos entorpece las clases en tres de cada cinco colegios. El secretario general de OCDE, Ángel Gurría, ha insistido en la necesidad de mejorar los resultados de los profesores para mejorar la educación: "Los buenos profesores son la clave para el éxito de las políticas educativas. La calidad de un sistema educativo nunca es mayor que calidad de su profesores en su trabajo", dice Gurría en una nota de prensa de la OCDE.
En general, los profesores pierden un 13% del tiempo de clase manteniendo el orden, pero en Brasil y Malasia el porcentaje crece hasta el 17%. Sin embargo, en Bulgaria, Estonia, Lituania y Polonia la cifra baja a menos del 10%. En España, el porcentaje se acerca a los más altos: el 16%.
El estudio de la OCDE, Informe internacional de enseñanza y aprendizaje (TALIS, en sus siglas en inglés), sugiere que los países pueden hacer mucho más para apoyar a los profesores y mejorar los resultados de los alumnos "si las administraciones se centran menos en el control de los recursos y los contenidos educativos y más en los resultados del aprendizaje", dice la nota de la OCDE. "Esto significa pasar de la uniformidad a la individualización de la enseñanza y el aprendizaje", ha dicho Gurría.
Los países participantes en el estudio son Australia, Austria, Bélgica, Brasil, Bulgaria, Dinamarca, Estonia, Hungría, Islandia, Irlanda, Italia, Corea del Sur, Lituania, Malasia, Malta, México, Noruega, Polonia, Portugal, Eslovaquia, Eslovenia, España y Turquía.
El 16% de las clases en España se pierde en imponer orden
Falta de incentivos e indisciplina son las principales dificultades docentes
J. A. AUNIÓN – Madrid – 17/06/2009
La falta de incentivos y el mal comportamiento de algunos alumnos son las cuestiones que más dificultan la efectividad de los docentes, según el informe publicado ayer por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) sobre cómo perciben su trabajo los profesores de secundaria de 23 países (se han tomado datos de cerca de 90.000).
Los profesores españoles son los que más formación continua reciben
Bulgaria, Estonia, Lituania y Polonia tienen los alumnos más disciplinados
España es el país que claramente destaca por la formación continua de sus profesores: el 100% de los encuestados había hecho cursos en los 18 meses anteriores y, en general, están dispuestos a formarse más (la gran mayoría de docentes de todos los países están contentos con su trabajo y dispuestos a enfrentar los retos). Sin embargo, el 16% del tiempo de clase en España se pierde en imponer orden a los alumnos y otro 7% en tareas burocráticas, como pasar lista.
No es el porcentaje más alto del estudio (en Brasil o Malaisia pasan el 17% del tiempo mandando callar), pero está por encima de la media (13%). En los países más disciplinados (Bulgaria, Estonia, Lituania y Polonia) dedican menos del 10%. En general, uno de cada cuatro profesores de todos los países pierde al menos un 30% de las clases en tareas administrativas o en lidiar con los alumnos que interrumpen.
La percepción docente del clima escolar es en España la peor de los países estudiados, aunque también destaca el estudio la especial autocrítica de los docentes españoles. El 60% de los docentes trabaja en un centro donde el clima no es adecuado, según sus directores (cuánto hay que esperar para que los alumnos se callen, que estén atentos a la explicación, las interrupciones o el ruido). En concreto, la indisciplina dificulta las clases al 70% de los docentes, un porcentaje muy parecido al de México, Italia, Eslovaquia y Estonia. Sin embargo, hay otras cuestiones que, para los directores españoles, lo dificultan más, por ejemplo, la falta de personal de apoyo: esto llega al 80% de los institutos.
En cualquier caso, más allá de los datos en bruto, el Informe internacional de enseñanza y aprendizaje (TALIS, en sus siglas en inglés) señala que en algunos países (Hungría, Italia, Corea del Sur, Polonia y Eslovenia) los profesores que creen en una enseñanza más participativa del alumno son más propensos a decir que el clima en clase es bueno. Mientras, los docentes que prefieren la transmisión directa de los conocimientos (el profesor enseña y el alumno escucha y aprende) tienden a ver más problemas de disciplina. Es el caso de Bélgica, Corea del Sur, Noruega, Polonia, Portugal, Eslovenia y España.
Además, no sólo los alumnos y los medios influyen. Según los directores del 39% de los docentes, la falta de preparación pedagógica dificulta bastante o mucho las clases (FETE-UGT pidió ayer más formación de este tipo). También lo hace que el profesor llegue tarde (34%) o falte (39%). Según la directora general de Evaluación y Cooperación Territorial, Rosa Peñalver, la falta de preparación pedagógica se resolverá con la sustitución del actual cursillo preparatorio por un master.
También admitió Peñalver que existe una falta de evaluación del trabajo docente. De hecho, el 45% de los profesores españoles no ha sido evaluado en los últimos cinco años, y apenas un 24% ha recibido evaluación
externa (el porcentaje más alto, sólo detrás de Italia). Esto no sólo quiere decir que se trabaja a ciegas, sino que se pierde un importante resorte para mejorar la calidad de la enseñanza, recordó Ben Jensen, uno de los analistas del informe, que asegura que donde existen estas evaluaciones, los profesores lo ven bien. Tres de cada cuatro profesores de los 23 países dicen no recibir reconocimiento por mejorar la calidad de su trabajo o ser más innovadores; en España sólo se beneficia de esos reconocimientos el 20%. También asegura el ministerio que eso se solucionará con la implantación de estatuto docente, una promesa pendiente desde la anterior legislatura.
El informe señala asimismo que los centros españoles tienen muy poca autonomía (valorada según la capacidad de la dirección para elegir profesores, fijar su salario inicial o las subidas de sueldo), sólo por encima de Brasil, México, Turquía, Italia y Malaisia.
Otro toque de atención
EL PAÍS – JOSÉ ANTONIO MARTÍNEZ 16/06/2009
La elaboración del informe TALIS por la OCDE supone el primer intento de conocer, a través de las opiniones del profesorado y de los directores, lo que ocurre "dentro" de los centros y las aulas de secundaria. Los datos que aporta TALIS tendrán que ser estudiados en profundidad, no obstante, del informe español pueden extraerse algunas conclusiones evidentes:
1. Los centros han de tener los recursos adecuados tanto humanos como materiales. En España falta, al menos, personal de apoyo pedagógico.
2. La titulación inicial de nuestro profesorado alcanza los niveles más elevados, y la formación a lo largo de la vida profesional también, mientras que "la formación y el apoyo iniciales" son de los más débiles.
3. Independientemente de la metodología elegida, la mayor eficacia del profesorado se produce cuando se ejerce con plena convicción lo que está haciendo, ya que esto genera un clima positivo en el aula, que es clave para mejorar los resultados del alumnado. En España el clima escolar es el "menos favorable" de los países participantes. También aparece como escasa "la colaboración profesional".
4. El profesorado no está en contra de que se le evalúe, sino a favor de una evaluación seria de su labor, siempre que reciba información del resultado, para mejorarlo, y que este sirva para su reconocimiento profesional. En España la evaluación del profesorado y de los centros es escasa.
5. Sobre la dirección de los centros, y en la línea del informe publicado por la OCDE a finales de 2008, y que ha tenido una repercusión prácticamente nula en nuestro país, el informe nos muestra que somos los más bajos en liderazgo pedagógico (incidencia en lo pedagógico) y de los más bajos en liderazgo administrativo (incidencia en la gestión): la capacidad real de los equipos directivos es prácticamente irrelevante.
6. También se pone de relieve que en España la autonomía de directores y centros con respecto al profesorado (promoción, selección, sanciones,…) es muy escasa, y en el caso de los centros públicos "simplemente no existe". Estas conclusiones debieran ser motivo urgente de reflexión y de adopción de medidas por parte de los responsables de establecer las políticas educativas. Asimismo, todos los responsables del proceso educativo deberíamos olvidarnos de ideas preconcebidas, aceptar lo evidente, y ponernos a trabajar conjuntamente, para contribuir a la mejora de la educación en nuestro país.
José Antonio Martínez es presidente de la Federación de Asociaciones de Directivos de Centros Educativos Públicos (FEDADI)