Ya estamos en Bolonia
26/01/2009 MIGUEL Miranda. El Periódico de Aragón.
Y en contra de lo que dicen algunos no ha habido ninguna mercantilización de la universidad, ni los empresarios han tomado al asalto el rectorado ni los hijos de los trabajadores han perdido oportunidades ni abandonado las aulas. En nuestra Universidad ya hay doce títulos adaptados y en ellos estudian más de 1.000 alumnos. Y casi 500 estudiantes se han matriculado en alguno de los 28 másteres oficiales que también se imparten y por cierto, a un precio similar a los antiguos doctorados. Por el contrario, estoy seguro de que con la innovación que el proceso ha traído consigo, los alumnos se han beneficiado de los cambios: una enseñanza en la que ellos son más protagonistas, en la que los profesores además de impartir la clase magistral, que no ha desaparecido, nos esforzamos por utilizar otro tipo de técnicas con las que los alumnos vayan adquiriendo distintas capacidades desde la primera semana de curso, preocupados todos por hacerlo además, con calidad en un proceso de mejora continua. Hemos empezado con ilusión y percibo que ellos lo notan. Saben que aquellos hábitos de ir o no a clase, conseguir unos apuntes y tener suerte en el examen final, se han acabado. Es el pasado. Estamos construyendo entre todos, otro tipo de Universidad que sin duda será mejor. Con dificultades, porque el cambio siempre asusta y hay más o menos resistencias, más o menos ganas y más o menos medios. Pero estamos en ello. Bolonia en este sentido, supone una oportunidad para mejorar y la hemos de aprovechar. Y para ello, converger con Europa significa también más recursos que son necesarios para la prolongación de los estudios que antes tenían tres años y ahora tendrán cuatro, para adecuar las instalaciones y los recursos didácticos, para que haya el número necesario de profesores, para potenciar la movilidad de los estudiantes entre universidades, para que haya más residencias universitarias que posibiliten esa movilidad y más becas. Pero Bolonia no es el enemigo. Es el acicate para cambiar a mejor. Una universidad mejor con la que construir una sociedad mejor.
Periodista