FAPAR lamenta que no se escuche la voz de las familias en los colegios Margarita Salas y Cesáreo Alierta
FAPAR lamenta que el Servicio Provincial de Educación de Zaragoza haya autorizado la propuesta de reducción del horario intersesiones de los centros públicos Margarita Salas y Cesáreo Alierta, después de que se consultase a las familias y estas lo rechazasen.
Los consejos escolares de los colegios Margarita Salas y Cesáreo Alierta decidieron en junio proponer la reducción del periodo intersesiones para el curso escolar 2022-2023, pese a que en votaciones previas las familias manifestaron mayoritariamente su voluntad de mantener el actual horario de comedor (servicio complementario educativo esencial para los niños y niñas y sus familias, que son las principales afectadas en la organización del mismo y que en estos centros ha sido gestionado por sus AMPAS siendo referente de calidad y satisfacción y que con esta decisión se ve muy comprometido) y que en el caso de Margarita Salas la dirección había manifestado voluntad de respetar el resultado de dicha votación (lo que sí han hecho centros como Doctor Azúa o Joaquín Costa).
La decisión de proponer este cambio se adopta en el consejo escolar (máximo órgano de participación y gestión de un centro y en él, aunque en minoría clara, estamos representadas las familias), pero precedida de una consulta a las familias cuyo resultado no se ha respetado. ¿Para qué se ha hecho entonces?
El derecho a proponer dicho cambio está recogido, entre otras, en las Instrucciones de final de curso emitidas por la Secretaría General Técnica el 13 de mayo de 2022
Cuando se desee modificar el horario general que tuvieran autorizado, el/la Director/a informará de la propuesta en la última sesión del Consejo Escolar. La comunidad educativa deberá ser informada con antelación y respaldará mayoritariamente el cambio. La propuesta especificará el horario general, horario lectivo y horario y condiciones de disponibilidad para el alumnado de los servicios e instalaciones. En caso de aprobación se comunicará, antes del 5 de julio, a la Dirección del Servicio Provincial compruebe, a través de la Inspección de Educación, que el horario permitirá la realización de todas las actividades programadas y que se respetan los criterios establecidos en la normativa vigente. En caso contrario, lo devolverá al centro para su revisión y adopción de las medidas oportunas
Por eso, es menos entendible la decisión de autorizar este cambio que no se ajusta a estas Instrucciones, puesto que no ha sido respaldado por las familias, a quienes no se les ha informado de las consecuencias del mismo, como tampoco se ha informado a las AMPAS que son quienes organizan y gestionan los servicios afectados por este cambio: comedor, transporte y actividades extraescolares.
Pero, si cabe, es más preocupante esta autorización porque se adopta en el momento en que la Ley de Participación Educativa ha iniciado su trámite parlamentario después de varios años de intenso trabajo y numerosas aportaciones desde todos los representantes de la comunidad educativa (alumnado, familias, profesorado, equipos directivos, etc…). Y esta decisión contraviene el espíritu y el texto de la misma entre otros en su artículo 13 referido a consultas y propuestas
….desarrollándose las consultas que afecten a un colectivo, buscando la opinión de todos sus miembros y con una intención vinculante por parte del órgano gestor.
De hecho, el pasado 21 de julio FAPAR, con varias asociaciones, incluido el Consejo Escolar de Aragón, participamos y defendimos la importancia y necesidad de esta Ley en el trámite de audiencia de la comisión de Educación de Las Cortes. Esta decisión es un mal comienzo para una Ley en la que las familias confiábamos para que nuestra participación, tantas veces dificultada, pudiera ser real, efectiva y útil, por lo que desde FAPAR pedimos que se reconsidere esta autorización y se permita un debate sereno a lo largo de este curso tal y como se ha pedido en distintos foros y reuniones, que recoja las opiniones y afecciones que esta decisión conlleva.
Zaragoza, a 2 de septiembre de 2022
FAPAR