Las bibliotecas públicas de Zaragoza, entre las peores de España
06/02/2009 EUROPA PRESS
Las bibliotecas públicas de Zaragoza se encuentran entre las peores de España en lo que se refiere a servicios, información a los usuarios y seguridad de las instalaciones, según los resultados de un estudio realizado por la revista Consumer-Eroski en el que se han analizado 100 bibliotecas de 18 ciudades.
En la capital aragonesa, se analizaron seis bibliotecas, una Pública del Estado y el resto municipales. Los técnicos de CONSUMER EROSKI visitaron sus instalaciones a mediados del pasado mes diciembre para valorar el estado general de cada una de ellas en los apartados de información, servicios, accesibilidad, seguridad y limpieza. Además, preguntaron por los pasos para tramitar el carné con el fin de conocer el funcionamiento del sistema de préstamo y consulta.
Los bibliotecas seleccionadas no lograron superar la prueba propuesta por la revista en seguridad, se vieron obstáculos en algunas salidas de emergencia. En cuanto a información, los indicativos acerca de cómo está distribuida la biblioteca resultan confusos para el usuario, y respecto a los servicios, dos de los espacios no cuentan con un catálogo informatizado a disposición de los usuarios. Lo mejor, de estas instalaciones es su accesibilidad, según señala el informe.
La valoración final del servicio que ofrecen las bibliotecas visitadas en la capital zaragozana se queda en el suspenso con un ‘regular’, la peor calificación del informe junto con Alicante y Pamplona. Esta mala nota se debe a los suspensos en servicios, información y seguridad. La limpieza consigue aprobar con un mediocre ‘aceptable’ y la ‘accesibilidad’ es el único apartado con buena nota, consigue un ‘bien’.
Aunque todos los centros analizados en Zaragoza cuentan con espacios de préstamo de CD y DVD, es decir, videotecas y fonotecas, existe una evidente escasez de otro tipo de salas como las de grupo; de estudio, sólo existían en dos de los centros, y de lectura, únicamente tres bibliotecas las tenían.
Según el estudio, ninguna de las bibliotecas disponía de taquillas, sólo dos no tenían servicio de fotocopistería y faltaban puestos de vídeo y/o audio, zona wifi y puntos de auto-préstamo en cinco de los seis centros.
Una de cada cuatro suspende en calidad
Una de cada cuatro bibliotecas públicas de España suspende en calidad debido a las carencias en servicios ofrecidos y en medidas de seguridad. De las 100 bibliotecas públicas analizadas en el conjunto del país –17 universitarias, 14 Públicas del Estado y 69 municipales o regionales– de 18 ciudades, sólo una de cada cuatro ofrece salas de estudio para grupos, el 27% carece de zona wifi, el 78% no tiene taquillas y el 40% no cuenta con puestos para visionar archivos de vídeo o de audio.
En una cuarta parte del centenar de edificios visitados no se hallaron salidas de emergencia, y entre las que se observaron, casi la mitad se encontraban cerradas. En el 76% no se vieron puertas cortafuegos y el 62% no estaban equipadas con rociadores de agua.
Estas carencias conviven, no obstante, con la buena información y atención dispensada en estas instalaciones públicas porque en el 87% de las visitadas se hallaron carteles claramente visibles con indicaciones sencillas sobre cómo y dónde encontrar las diferentes salas de la biblioteca; las correctas medidas para garantizar la accesibilidad de estos recintos y la excelente limpieza observada en las bibliotecas del estudio.
En el 90% de los espacios analizados, los materiales de préstamo y consulta estaban en buen estado y ordenados en las estanterías.
Consultar:
Estudio completo realizado por la revista Consumer-Eroski